La no emisión de un decreto que declare un propósito central para direccionar las estrategias del Gobierno Nacional en 2021 constituye un serio error y una gran deficiencia de pensamiento estratégico en la comunicación política oficial.
Si bien es cierto que la pandemia afectó duramente a toda la parte estructural y aspectos superestructurales del país, entiéndase la economía (producción, actividad turística, empleo, ingreso) y la salud (física y mental) de los dominicanos, es un hecho que los "pensadores" del gobierno debieron emplearse a fondo para idear y consolidar un manifiesto que se constituyera en una suerte de "grito de guerra" enfocado en unir las voluntades del gobierno y la sociedad en aras de perseguir entre todos la recuperación nacional.
Esa declaración a la firma de la Consultoría Jurídica de la Presidencia de la República tiene su origen en la gestión del menor esfuerzo y denota falta de un liderazgo motivador, capaz de "reagrupar o direccionar a todo un pueblo", mientras por el contrario peligrosamente disemina la señal de una seria deficiencia creativa, así como la carencia de planificación de la comunicación politica del gobierno dominicano.
"Año de la recuperación económica y la salud colectiva nacional", sería un manifiesto de fácil asimilación para los sectores estratégicos y la población general y, por tanto, una convocatoria unificadora; concentradora del esfuerzo nacional y contudentemente realista, porque toca las partes más sensibles afectadas por la pandemia por el SARS/CoV-2 en la República Dominicana.
